Cuando han pasado las épocas de mayor frío y se aproxima el verano, lo común es que queramos llevar nuestras almohadas y edredones a la tintorería. Pero, ¿Sabías que puedes evitar ese gasto y obtener un excelente resultado lavando tus almohadas en casa? La respuesta es un sólido sí.
Aprender a lavar las almohadas en casa puede contribuir de forma muy positiva con nuestra higiene; pues, los especialistas recomiendan lavarlas de forma regular para evitar la acumulación de bacterias, hongos y ácaros en su superficie. Recuerda, ponemos nuestro rostro sobre ellas todas las noches.
Entonces, ¿Cómo lavar las almohadas sin estropearlas? Eso, es justo lo que estamos a punto de explicarte aquí abajo.
Contenidos
Lavar almohadas según su tipo
Viscoelástica
Lo primero que debes saber, es que, este tipo de material no debe ser lavada de forma común; pues, si se mojan demasiado, el material interno pierde el efecto memoria y sus prestaciones de adaptabilidad. Así que, lo más recomendable será lavar la funda de forma regular y, eventualmente, dedicar un lavado a mano de la almohada.
Cuando el momento haya llegado, hazlo de la siguiente manera:
- Toma un recipiente, llénalo con agua tibia y añade un poco de jabón neutro.
- Busca un paño limpio y humedécelo en la mezcla, procura escurrirlo con la mayor fuerza que puedas.
- Luego, colócalo sobre la almohada y comienza a frotar en círculos hasta sacar la suciedad visible.
- Toma una toalla y seca muy bien la superficie de la almohada.
- Al terminar, toma la almohada y colócala sobre una zona plana donde pueda secarse correctamente; por supuesto, lo ideal es colocarla al aire libre pero siempre dentro de la sombra. De esta forma tendrás una almohada limpia y sin riesgo de la aparición de moho y malos olores.
Látex
La mayoría de las almohadas de látex pueden ser lavadas en máquina con la única excepción de aquellas fabricadas en látex hipoalergénico. Pero, el hecho de que las indicaciones del fabricante permitan este tipo de lavados, la mejor forma de hacerlo es a mano.
El látex es un material delicado que puede perder su forma prematuramente si obtiene un lavado demasiado brusco dentro de la lavadora. Por lo tanto, el procedimiento es el siguiente:
- Toma un recipiente con abundante agua fría y coloca un poco de detergente, preferiblemente aquel que está hecho para prendas delicadas.
- Toma la almohada y sumérgela en el agua, pasa una esponja sobre su superficie o frota delicadamente sobre la suciedad visible. Evita a toda costa frotar con fuerza.
- Al terminar el lavado, procede a enjuagar a conciencia la almohada hasta asegurarte de que no queda ningún residuo de jabón.
- Luego del enjuague, procura retirar todo el excedente de agua y pon la almohada a secar al aire libre en un área con sombra y en forma horizontal.
- Deja secar por el tiempo necesario antes de utilizarlas.
Plumas
Entre los adoradores de lo clásico, las almohadas de plumas naturales pueden considerarse lo mejor que existe en cuanto a descanso; pero, no es muy recomendable lavarlas en lavadora, pues, el relleno puede sufrir deformaciones.
Por otro lado, lavar las almohadas de plumas sintéticas es muy sencillo, ya que, son aptas para lavado en máquina. Con la única previsión de colocar un ciclo delicado y no superar los 40° cuando las lavamos con agua caliente; así como, accionar el centrifugado lo más lento posible.
Lavar almohadas en la lavadora
Comienza por leer la etiqueta del fabricante y asegurarte que el tipo de almohada que tienes puede ser lavada en máquina. Luego, sigue los pasos:
- Utiliza un programa de agua fría o en todo caso, de agua tibia (Que no supere los 40°C).
- Agrega un poco de detergente líquido al agua; pero, tal como mencionamos arriba, procura que el detergente a elegir funcione para prendas delicadas para evitar que se deterioren los tejidos de la almohada.
- Añade pequeñas prendas o esferas de lavado para prevenir daños en la forma de la almohada.
- Elimina los restos de jabón realizando el ciclo de enjuague un mínimo de dos veces, siempre en velocidad delicada.
- Si puedes elegir un ciclo de centrifugado lento, hazlo; si no, entonces escurre manualmente la almohada y colócala a secar al aire libre en una superficie plana y techada.
Eliminar las manchas de las almohadas
A pesar de que seamos muy cuidadosos con nuestras almohadas, es inevitable que en algunas ocasiones puedan aparecer manchas en su superficie. Si alguna vez has visto unas manchas amarillentas sobre alguna de las caras de la almohada, debes saber que las producimos nosotros mismos.
Pues, en su mayoría, las manchas son producidas por la saliva, la grasa del cabello y la sudoración. Para devolver la imagen pulcra a tu almohada sigue estos pasos:
- Toma un recipiente para luego añadir una buena cantidad de agua, seguida por jabón neutro y un poco de lejía si la mancha es muy grande.
- Con un paño, esponja o cepillo de cerdas suaves, frota las manchas con delicadeza.
- Lava la almohada y enjuaga con abundante agua,
- Deja secar en la sombra en una superficie plana.